EN LA LUNA DE VALENCIA...TRABAJO Y PLACER

Qué hermosa mañana desde el balcón de casa de mi hermana, qué aromas, que frescor desprendía el Jucar rodeado de naranjos, a reventar de frutos.

Me sorprendió esa ciudad costera, qué cambio verla vacia de gentes, siepre la habia visitado en verano, me encantó su calma, su silencio, su bahia con solo el mar por testigo, de un azul limpio y hermoso, y su luz. Mi hermana me llevó al faro desde donde se divisaba toda la línea de la costa, repleta de palmeras con los racimos de dátiles de color amarillo intenso colgando de los penachos de hojas. Ví rincones preciosos con chiringuitos de madera cerrrados, con sus porches vacios que te invitaban a sentarte en sus sillas y relajar el ojo en el horizonte, precioso.

Curioso...poquisimos apartamentos con el cartel de SE VENDE, eso significa que la gente se encuentra agusto y no quieren marchar. CRISIS?? ...what crisis.

Mi hermana Mari y Jose Luis mi cuñado en una pose como aquel que dice...qué hay de nuevo viejo?...(jajaja) hacía tiempo que no nos veíamos y me apetecia pasar por alli, de camino a unas visitas que tenía con gente del mundo del toro en Valencia, qué cambiada esta esa ciudad; enorme, bulliciosa, luminosa. La parte nueva del puerto, da la impresión que te va a saltar encima, cruzas el rio y entras de golpe en la parte vieja, calles estrechas gentes, por doquier a sus cosas CRISIS??...no la ví.

Estuve tomando café en un bar restaurante de ambiente taurino cerca de la plaza, lleno a la hora de comer.